viernes, 30 de diciembre de 2011

Como Ave Fénix

Si me pongo a analizar como ha sido este año, no puedo llegar sino a la conclusión de que Mejor no pudo haber sido!

Siempre es difícil afrontar los cambios, por la naturaleza misma del ser humano tendemos a rehuir a lo que traen los cambios, pero Yo necesitaba ese cambio a gritos…sabía que esto significaba adentrarme a lo desconocido, a descubrir cosas que no sabían que iban a traer…pero que eran indispensables para mi crecimiento, no podía dejar pasar la oportunidad que Dios y la vida me estaban otorgando…no iba a negarme!

Durante un buen tiempo se han dado varias etapas, he llorado, he dejado de comer y adelgazado lo inimaginable, me he purificado hasta el punto de dejar de oler y saborear…pero de esta purificación siento que he renacido, nueva de adentro hacia afuera, con un poder que ni yo tenía conciencia que existía, una determinación para frenar lo que me esta haciendo mal y una capacidad para decidir ser feliz pase lo que pase!

Y ahora que el año esta por terminar, simbólicamente voy a quemar un año viejo con mi representación y como no creo en casualidades…esto cierra con broche de oro este capitulo de 40 años de mi vida y voy a quemar a este monigote de Ana María como debe ser….ahí  se ira todo! Todo lo que no me hace crecer, lo que me limitó, lo que me entristeció, lo que no podía, lo que me ponía malgenio, todo lo que fui! Y renaceré de las cenizas como Ave Fénix, renaceré con todas mis glorias…logrando una Vida Mejor!

Desde mi corazón.

Anamaria

jueves, 22 de diciembre de 2011

Mi Albertito.

Hoy hace 17 años fui madre por primera vez….nació el niño más hermoso que había visto, ese producto del amor que ante mis ojos era lo más perfecto y divino que yo podía haber creado.

Fue tan deseado, tan esperado, tan querido…mi mejor regalo de navidad!

 Todavía al recordar tengo la sensación que produjo en mi este ser tan chiquito y tan lindo…eso mas que todo…tan lindo!  Mejor de lo que lo pude soñar… y ese temor a lo desconocido, a la responsabilidad, a tantas cosas que se venían.

Pero, ahora, que lo veo tan grande, no lo puedo creer, es mejor de lo que lo pude imaginar, es un chico sano, bueno, guapo, inteligente…soy su madre, siempre lo veré maravilloso, pero es que lo es!  A pesar de venir sin instrucciones, de todas esas veces que a punta de ensayo y error me decías: “corrígeme”, “tranquilízate Ma!” y “porque estas tan neurótica?”  y de esas veces que también dijiste “necesito un abrazo” o “solo tu dices que soy bueno”…

Sé que no ha sido fácil, pero por eso mismo, valoro lo que eres, porque al verte solo puedo agradecerle a Dios por haberte hecho mi hijo y le pido a diario que me haga ser la mamá que tú necesitas.

 Te amo tanto Flaquito, que Dios siempre te bendiga!!!

Desde mi corazón.
Anamaria

lunes, 19 de diciembre de 2011

Carencia afectiva.

El otro día comentándole ciertas tristezas a una amiga, me respondió que creía que tenía una carencia afectiva, me quedé pensando y al principio eso me molestó, pero después de darle vueltas al asunto, llegué a la siguiente conclusión.

Claro que tengo una carencia afectiva!, es decir, soy un ser humano, de carne y hueso, no un mueble, siento, pienso, necesito cosas…estuve casada durante 16 años!!!  Y llevo 3 años sola, por Dios, como no voy a tener un vacío emocional, sé que esta es mi realidad ahora, pero eso no quiere decir que sea algo fácil de llevar, mis hijos ocupan mi vida, sí! Pero el amor de un hijo siempre es diferente…

Creo que estoy en todo mi derecho de sentirme triste, a veces, de llorar, otras veces, de necesitar afectos…muchas, pero aun así he optado por salir adelante contra viento y marea, SOLA!

Pero así he comprendido que no soy infalible, que debo permitirme ser vulnerable, llorar, querer cosas que no puedo y no sentirme mal, ni rara…

Sé que tengo todo para ser feliz, pero no siempre siento que eso satisface, lo que creo que me falta y aunque es una constante lucha interna por valorar y bendecir todo, tiendo a decaer y seguir creyendo que en las cosas del mundo voy a encontrar mi felicidad…yo sólo le pido a Dios, como dice la famosa canción, que me permita ser feliz aquí, ahora, con lo que me toca vivir, con lo que tengo y con lo que soy…y sí puedo decir, que hay bastantes días que me levanto con una sonrisa, agradecida y digo “Gracias Padre…hoy SOY FELIZ!!!”
Desde mi corazón.

Anamaria

lunes, 12 de diciembre de 2011

Valorar

Hace un tiempo atrás sentía que no tenía capacidad de asombro, que nada me satisfacía, que nada me gustaba, con nada estaba contenta y era verdad…porque no estaba bien…con lo que, realmente, uno tiene que estar bien…con uno mismo.

Toda mi vida he soñado con vivir en Estados Unidos, me encanta todo, el idioma, la seguridad,  el estilo de vida, todo!!! Pero ese sueño no se ha realizado y creo que no se ha realizado por una sencilla razón… porque si viviera allá, quisiera vivir acá.
Es la magia que da el no tener algo, es decir, si quieres algo y lo llegas a tener, ya esa carencia está cubierta y no requieres de eso más.
 Mientras que si algo no es totalmente tuyo o puedes acceder a esto como probaditas, siempre te quedarás con las ganas de más… creo que eso me pasa con mi sueño de vivir en USA, creo que si se me hiciera realidad, ya no disfrutara como lo hago cuando tengo la oportunidad de estar allá, dicen que el césped del vecino siempre es más verde, usualmente estamos queriendo lo que no podemos tener y así valoramos más cuando logramos conseguir esos pequeños gustitos de vez en cuando.
Después de pérdidas importantes en mi vida, de verme despojada que cosas que das por sentadas que van a durar para siempre es cuando tomo conciencia de eso que he tenido pero que no he visto…que no me percataba que estaban porque creía, por algún motivo, que tenían que estar, pero ahora que las veo, las valoro…cosas sencillas de la vida, oler a mis hijos, conversar con ellos, pasear en bicicleta por la carretera vía a Las Nubes, viajar pagándome yo todo!  Ya no me desgasto en tonteras, los problemas que antes me agobiaban ya no los veo como tales, me parecen insignificante…ahora disfruto de lo más mínimo…
 Desde mi corazón.

Anamaria

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Una experiencia mas...

La vida me ha hecho pasar por muchas experiencias, pero nunca me imaginé pasar por el rechazo y puedo decirlo, muy sinceramente, ha sido muy doloroso…aún más de lo que fue la infidelidad y el divorcio, ya que estos eran una consecuencia lógica de un matrimonio que ya llevaba mucho tiempo mal, pero cuando me toco toparme con una persona que hizo click conmigo desde el primer instante, donde habían tantas cosas en común, compartíamos tanto y pensé que eso que había soñado por tanto tiempo, ese hombre que pensé que no existía, tan afín a mí, de repente se  presentaba ante mí, era la contestación de Dios a ese pedido de “ Padre si en tus planes está ser feliz a lado de un hombre, te pido que él sea mandado por Ti” y esas características sine qua non que las tenía escrita en mi check list se iban dando tan naturalmente, que era casi de Ripley…llegué un momento a pensar que era un sueño, que no podía ser todo tan perfecto, hasta que, lo más importante que se debía dar…definitivamente, no se dio.
El solo quería mi amistad, nada más y nada menos, y aunque todo lo que hacía era lo contrario a lo que decía, esa fue la triste realidad de este hombre de mis sueños…y tuve que aceptar que no quería nada conmigo, porque? Pues por ninguna razón…solo porque no!
Y ahí es donde me di cuenta que estaba siendo rechazada…sin motivo aparente, solamente no me quería y esto dolía mucho… en mi ego, orgullo, autoestima, como le quiera decir, solo sé que dolía…y que la vida sigue siendo injusta, porque estaba viviendo la típica situación de “me quiere, el que no quiero y quiero, al que no me quiere”.
Y como lo vi en la película “Alguien tiene que ceder” No creo realmente que pueda zafarme de ser herida, no puedo esconderme del amor toda mi vida porque quizá no salga todo bien…tengo que arriesgarme, hasta de ser rechazada…
Pero más bien podría citar la frase de la película “My Sassy girl” donde dice: algunos estamos hechos para sufrir. Algunos creemos que tenemos esta especie de destino y que somos descartados. Tenemos que permanecer vivos…porque tenemos que ver cómo termina la historia…
Así que…to be continued….

Desde mi corazón.

Anamaria